RABAT
Rabat es un consejo local de la República de Malta muy ligado a la historia religiosa y católica de esta república, ya que en ella vivió durante un tiempo el personaje que hizo de esta isla-estado uno de los países más católicos del mundo. San Pablo. También estuvo marcado por el paso de una Santa que llegó desde Sicilia y a ella volvió para ser martirizada, Santa Agatha (Santa Agueda en castellano)
Rabat posee una población de casi 12.000 personas. El nombre de Rabat viene del árabe (suburbio), a una distancia muy corta, perfectamente asequible a través de un pequeño paseo a pié se encuentra la que fué capital del país antiguamente Mdina. Por tanto Rabat sería el suburbio de Mdina.
Rabat en Malta tiene fama por sus catacumbas de los siglos IV y V que la UNESCO las declaró Patrimonio de la Humanidad. Existen varias pero dos son las más populares. Las de San Pablo (arriba) y las de Santa Agatha (abajo), si bien las de San Pablo son más famosas por pertenecer al estado, las de Santa Agatha son más interesantes y además el hecho de disponer de atractivos frescos en sus paredes las hacen más bonitas e interesantes pero son de propiedad privada, pero se permite su visita en horas determinadas. Unas de otras están a relativamente corta distancia.
En las catacumbas siguiendo la costumbre romana se enterraban a los muertos ya que se consideraba que no debían enterrarse en las ciudades y por tanto estas eran construidas fuera de ellas. También sirvieron de refugio a los cristianos cuando eran perseguidos si bien no parece que las de Malta se usaran para ese propósito. El hecho de que Santa Agatha si estuvo habitando en ellas, fué por que al llegar de Sicilia donde el cristianismo estaba perseguido se instaló en ella, aunque parece que el cristianismo no estuvo nunca perseguido en Malta. La Santa en cuestión decidió regresar a Sicilia donde fué martirizada.
Los frescos de las catacumbas de Santa Agatha son el máximo atractivo de ellas. Parece ser que delante de las tumbas existían unos espacios donde los familiares de los fallecidos oraban y además celebraban con comidas los acontecimientos fúnebres de sus familiares.
En el año 60 San Pablo se estableció durante tres meses en la isla de Malta debido a su naufragio en la isla cuando navegaba de Creta a Roma. Durante esos tres meses se estableció en una pequeña cueva accesible desde la iglesia principal de esta ciudad y que hoy día es visitable. Curiosa la gran devoción que se tiene a San Pablo (patrón de Malta) y no a San Lucas, que según la tradición íba con San Pablo y por tanto también naufragó con el y estuvieron durante tres largos meses en esta ísla que por entonces se llamaba Melita. La capilla que recuerda el hecho sí posee a un lado una imagen de San Lucas.
La cueva donde nos marca la tradición que estuvo San Pablo es un lugar de mucha peregrinación. Como ejemplo el Papa Juan Pablo II la visitó y así lo hizo también el Papa actual. La lámpara de plata en forma de barco de vela fué un regalo de los Caballeros de la Orden de Malta.
Rabat es una ciudad con bastante encanto, sus calles están decoradas con muchos motivos religiosos que recuerdan especialmente a San Pablo (patrón de la isla) y como modo de ejemplo o bien nos da la bienvenida o nos despide (según hacia donde vayamos) ya que el tunel que nos separa de Mdina está decorada con una gran estatua de este personaje que sin duda es el más famoso e histórico de la isla.
Para finalizar no debemos confundir Rabat (la capital de Gozo también llamada Victoria) con el Rabat de la isla principal de Malta. Cada isla principal maltesa tiene su propio Rabat, que comparten nombre con la capital de Marruecos pero que nada tiene que ver con estas.
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